Aldea Andres Bello

Nuestros triunfadores en el evento gastronomico y cultural!

Aldea Andres Bello representando a Mexico!!

Representando a Mexico en el evento gastronomico!!

Para cerrar con broche de oro

No podian fatar los Mariachis para una super presentacion del pais de Mexico

Simulacro de Audiencias

Nuestros triunfadores del PNF de Juridico participaron en un Simulacro de audiencias orales y publicas!

Elecciones de Voceria 2024

Se realizaron las elecciones de Voceria en nuestra aldea el 26 de Octubre del año en curso.

Encuentro deportivo


 Actividad Deportiva en la Aldea Andrés Bello: ¡Un Día de Energía y Diversión!

El sábado 9 de noviembre de 2024, el polideportivo Venalum se convertirá en el epicentro de la actividad física y la camaradería universitaria. La Aldea Andrés Bello organiza una emocionante jornada deportiva con diversas actividades que invitan a todos a participar y disfrutar.

Agenda del Evento:

  • Caminata 1K: Iniciaremos el día con una caminata de 1 kilómetro, ideal para calentar motores y disfrutar de un recorrido amigable que promueve la salud y el bienestar.

  • Bailoterapia: Nada como el ritmo y el movimiento para elevar los ánimos. La sesión de bailoterapia promete ser una explosión de energía, perfecta para todos los niveles de condición física.

  • Béisbol Cinco (Pelotica de Goma): Una variante divertida y dinámica del béisbol tradicional que se juega con una pequeña pelota de goma. Es una actividad perfecta para equipos pequeños y fomenta el trabajo en equipo y la coordinación.

  • Fútbol Sala: Los amantes del fútbol no se pueden perder esta oportunidad de mostrar sus habilidades en la cancha de futsal. Partidos rápidos y emocionantes garantizan la adrenalina.

  • Dominó: Para aquellos que prefieren un desafío mental, el torneo de dominó será el lugar para demostrar estrategia y concentración en este clásico juego de mesa.

El evento no solo es una excelente manera de promover el deporte y la actividad física, sino también una oportunidad para fortalecer los lazos entre los estudiantes y fomentar un espíritu de comunidad. ¡No te pierdas este día lleno de acción y diversión!

Elecciones Estudiantiles en la Aldea Andrés Bello

 Elecciones Estudiantiles en la Aldea Andrés Bello: Voz y Voto para el futuro.

El día sábado 26 de Octubre del año presente, se realizaron las elecciones de las diferentes vocerias en la aldea Andrés Bello.

Las elecciones estudiantiles representan un momento crucial para la comunidad educativa. No solo permiten los estudiantes elegir sus representantes, sino que también fomentan un espíritu democrático participativo. En la Aldea Andrés Bello en Puerto Ordaz, Estado Bolívar, este proceso cobra una importancia especial, reflejando el compromiso de los jóvenes con su entorno académico.





Los candidatos a las diferentes vocerias










Primer encuentro municipal de egresadas de la Misión Sucre Productiva, Municipio Caroní

 


*PRIMER ENCUENTRO MUNICIPAL DE EGRESADAS*

*Misión Sucre Productiva Caroní, Estado Bolívar*

El pasado sábado 6 de junio, las instalaciones del CTE Cachamay se convirtieron en el escenario de un evento especial organizado por la *Misión Sucre Productiva en honor a las Mujeres Egresadas* de los diferentes programas de formación desarrollados en las Aldeas Universitarias del Municipio Caroní, Estado Bolívar, en el marco de la GRAN MISIÓN VENEZUELA MUJER .


La jornada estuvo marcada por la presencia destacada del Coordinador Estadal MSc.Neudys López y la Coordinación de procesos de gestión, quienes dieron inicio a una serie de emocionantes actividades. Tres egresadas tuvieron la oportunidad de compartir sus experiencias y conocimientos a través de enriquecedoras ponencias que inspiraron a todos los presentes.


Además de las presentaciones académicas, el evento se enriqueció con un vibrante acto cultural llevado a cabo por triunfadores, operarios, docentes y coordinadora de la Aldea 13 de Abril.

Este acto no solo buscaba mostrar el talento artístico de la comunidad universitaria, sino también fomentar el espíritu de colaboración y celebrar los logros alcanzados por las egresadas.


La Misión Sucre Productiva demostró una vez más su compromiso con la formación integral de sus estudiantes, brindando un espacio de encuentro y reconocimiento para todas aquellas mujeres que han culminado con éxito sus estudios en las Aldeas Universitarias. Esta actividad no solo fortaleció los lazos entre la institución y sus egresadas, sino que también sirvió de inspiración para las generaciones futuras que seguirán su ejemplo en la búsqueda de la excelencia académica y personal.












Simulacro de Audiencias

 Simulacro de audiencias orales y pública del Primer Circuito Judicial Estudiantil Misión Sucre UBV Estado Bolívar Triunfadores y Triunfadoras del PFG ESTUDIOS JURÍDICOS Décimo y Séptimo semestre de la Aldea Universitaria Andrés Bello facilitador Abogado Álvaro Herrera

















Bailoterapia

 La alcaldía del municipio Caroni organizó un encuentro con diferentes entes estatales para realizar una bailoterapia con el fin de recrear y hacer deporte, el evento ocurrio el Sábado 07 de Julio de 2024, en San Félix plaza Bicentenario




 







feliz dia del Trabajador

 Feliz día del Trabajador les desea la Aldea Andrés Bello




19 de abril de 1810: Proclamación de la independencia de Venezuela

 19 de abril de 1810: Proclamación de la Independencia de Venezuela




Un jueves santo de 1810, específicamente el 19 de abril se inició en Caracas el comienzo de una etapa en la historia de Venezuela. En este día, el cabildo de Caracas, con el apoyo de parte del pueblo y de importantes sectores de las fuerzas armadas, tanto de los batallones de veteranos como de milicias, así como de destacados personajes del clero, la sociedad y de los intelectuales, depuso al gobernador y capitán general Vicente Emparan y a los demás altos funcionarios españoles, enviándolos al exilio. Dicho movimiento revolucionario que se llevó a cabo de una manera incruenta, en definitiva tuvo un impacto en los campos político, económico, social y cultural no sólo de Venezuela sino de toda Sudamérica.

Antecedentes

Entre los antecedentes más cercanos al 19 de abril, se hallan la conspiración de Gual y España en 1797, la expedición libertadora de Francisco de Miranda en 1806 y la conspiración de los Mantuanos en 1808. En relación al movimiento llevado a cabo en Caracas y La Guaira por parte de Gual y España, en el mismo participaron individuos de todos los sectores sociales, excepto los mantuanos; tratándose en términos generales, de un proyecto revolucionario igualitario, republicano y democrático, con proyección hacia el resto del continente. En cuanto a sus líderes, tenemos que Manuel Gual era un hijo de un militar distinguido que había defendido La Guaira 50 años antes; por su parte, José María España había sido teniente de justicia de Macuto; es decir, ambos eran hombres cultos incorporados a la administración colonial. A la conspiración se sumaron también republicanos españoles que poco antes habían organizado en Madrid una revolución similar, quienes fueron apresados y remitidos a América como reos de Estado. En este grupo destacaba Juan Bautista Picornell, quien en poco tiempo estableció contacto con Gual y España. El ideario de la revolución de estos funcionarios de la corona se expresó en unas Ordenanzas que en nombre de la Santísima Trinidad se proponían a restituir al pueblo americano su libertad. Entre los puntos fundamentales de este programa figuraban la instauración en los departamentos de Venezuela de un nuevo gobierno; y la proclamación de los derechos del hombre (igualdad, fraternidad, libertad y propiedad), lo que contribuiría a la eliminación de las clases sociales por parte de la República. Asimismo, dicho movimiento pretendía extender la revolución a otras regiones de América. Otro documento importante de la revolución de Gual y España fue el folleto de los derechos del hombre, que fue impreso en la isla de Guadalupe. No obstante, la conspiración se descubrió antes de que llegase a estallar. Los revolucionarios españoles lograron huir y se refugiaron en las Antillas. Manuel Gual fue a Trinidad, donde murió, se cree que envenenado en 1800. José María España, quien había huido y regresado, fue apresado y ejecutado en la plaza mayor de Caracas en 1799. Aunque la conspiración en definitiva fue bañada en sangre, conmovió la tranquilidad de la sociedad colonial, y generó una honda preocupación en los mantuanos caraqueños, quienes vieron amenazada su posición preeminente en la sociedad.

En 1806 la tranquilidad de la vida colonial venezolana se vio una vez más sacudida, cuando Francisco de Miranda, emprendió una expedición libertadora de Venezuela desde Nueva York. Disponía de tres barcos, y la mayoría de los tripulantes, oficiales y soldados, eran norteamericanos. Miranda intentó desembarcar en Ocumare de la Costa, pero varios buques españoles se lo impidieron, refugiándose en Trinidad. Meses después intentó un nuevo desembarco en Coro, pese a que en esta ocasión logró poner pie en tierra, la población huyó, por lo que Miranda tuvo que desistir de sus planes. Sin embargo, a bordo del buque "Leander" traía una imprenta con la cual imprimió proclamas que incitaban a los venezolanos a combatir por su libertad e independencia. También difundió la célebre "Carta a los españoles-americanos" del jesuita peruano Juan Pablo Viscardo, en la que éste animaba los americanos a defender sus derechos y los de sus sucesores. Al fracasar su expedición, Miranda se trasladó a Trinidad y posteriormente a Inglaterra, desde donde prosiguió promoviendo la independencia de Venezuela y de América Latina.

Mientras que el movimiento de Miranda tenía como objeto tomar el poder de Venezuela desde el exterior, para hacerla libre e independiente; la conspiración de los mantuanos en 1808 intentaba apoderarse del poder desde dentro, es decir, mediante un golpe de Estado. Para este momento, los mantuanos tenían el poder económico a través del control del Cabildo, el Real Consulado y la agricultura, y aspiraban a obtener el poder político ya fuera Venezuela independiente o por lo menos autónoma. La invasión en 1808 de España por parte de los franceses y el arresto del rey Carlos IV y su sucesor Fernando VII, crearon el vacío el poder propicio para los intereses del mantuanaje caraqueño. En tal sentido, al enterarse los mantuanos que en todas las provincias españolas se organizaron juntas para preparar la resistencia contra las fuerzas invasoras y para dirigir la política de cada región, le solicitan al capitán interino de Venezuela, Juan de Casas, que organice también una junta con la misma característica de las españolas y en la cual tuvieran ellos el puesto preponderante; en otras palabras era una revolución interna que no pretendía cambiar el orden social. En definitiva, la conspiración de 1808 fracasó debido a que el capitán general no accedió a las demandas de los mantuanos, poniendo en prisión a los más exaltados y enviando a sus haciendas a los más moderados. También fracasó este movimiento, como consecuencia del apoyo de los oficiales de las milicias de pardos, quienes se presentaron ante Casas y se mostraron dispuestos a combatir contra los mantuanos, si éstos persistían en sus propósitos.

El 19 de abril de 1810 renació la conspiración de los mantuanos, quienes en esta ocasión se habían procurado la cooperación de los batallones veteranos o las milicias, así como el apoyo de los notables, los intelectuales, de parte del clero y otros sectores de la sociedad, y de un núcleo considerable del pueblo. Una vez eliminada la posibilidad de toda resistencia en la Península, los notables caraqueños concibieron la constitución de una junta similar a las formadas en España a fin de regir los destinos de la provincia.

El capitán general Vicente Emparan, deseoso de ganar tiempo e indeciso ante el camino a seguir, suspendió la sesión del Cabildo y se dirigió a la catedral; sin embargo a las puertas de ésta, uno de los revolucionarios, Francisco Salias, se interpuso y tomando del brazo a Emparan, le conminó a regresar al Cabildo. La actitud de Salias fue ampliamente celebrada por la multitud en general y por un grupo de conjurados; ante la osadía de Salias, los soldados que formaban la guardia del capitán general hicieron un ademán de apercibir sus armas, pero una orden del oficial venezolano que los mandaba, los mantuvo firmes en sus puestos sin intervenir. Dadas la circunstancias, Emparan regresó al Cabildo, acompañado de los alcaldes, regidores y notables, mientras una multitud invadía la plaza mayor. Al poco tiempo llegaron al Cabildo el abogado Juan Germán Roscio, el canónigo José Cortés Madariaga y otros representantes del pueblo y del clero, quienes se incorporaron a la reunión. Presionado por los factores de poder presentes en el Cabildo de Caracas, Emparan pronunció las palabras que señalaron el principio del fin, por lo menos jurídicamente, del régimen español en Venezuela. Dirigiéndose al pueblo congregado en la plaza, desde el balcón del cabildo, les preguntó si deseaban que él continuase mandando; ante la respuesta negativa de las personas presentes, exclamó Emparan: "¡ Pues yo tampoco quiero mando!". Luego de esto, quedó establecida la que oficialmente recibió el nombre de Junta Suprema Conservadora de los Derechos de Fernando VII.
El mismo 19 de abril de 1810 fue redactada el acta en la cual se consignaba el establecimiento de un nuevo gobierno. En la misma se precisaba que el gobernador y capitán general, el intendente de Ejército y Real Hacienda, el subinspector de artillería y el auditor de Guerra y asesor general, así como la Real Audiencia, quedaban privados del mando que ejercían, a la vez que suprimían esas instituciones. En consecuencia el Cabildo de Caracas, con sus 2 alcaldes José de Llamozas y Martín Tovar y Ponte a la cabeza, asumió el poder, incorporando en su seno a los representantes del clero, del pueblo y de los pardos, ya mencionados, mientras que el mando militar era confiado momentáneamente al teniente coronel Nicolás de Castro y al capitán Juan Pablo Ayala. El acta del 19 de abril fue firmada por todos los asistentes al Cabildo extraordinario de ese día, incluyendo a los funcionarios españoles depuestos (Vicente Emparan), los que desempeñaron un papel secundario y los que a partir de ese momento asumieron el poder (Tovar, Roscio, Cortés de Madariaga, etc.). El acta fue leída el mismo día en diversos lugares de Caracas por los escribanos Fausto Viaña y José Tomás Santana, quienes certificaron que la población reaccionó gritando las siguientes consignas: "Viva nuestro Rey Fernando VII, nuevo Gobierno, Muy Ilustre Ayuntamiento y Diputados del Pueblo que lo representan".
En definitiva la revolución se llevó a cabo sin derramamiento de sangre. Los funcionarios depuestos fueron conducidos luego a La Guaira y encerrados en las fortalezas o confinados a bordo de buques anclados hasta que se les expulsó. De acuerdo con el testimonio de uno de ellos, el intendente Basadre, durante el tiempo que estuvo en prisión pudo apreciar como los revolucionarios compusieron e hicieron circular canciones alegóricas de su Independencia, en las cuales convidaban a toda Hispanoamérica a hacer causa común y a tomar "... a los caraqueños por modelo para dirigir revoluciones" Al parecer, ya entonaban la canción que mucho más tarde fue declarada Himno Nacional de Venezuela: "Unida por lazos/ que el cielo forjó/ la América toda/ existe en Nación/ y si el Despotismo levanta la voz seguid el ejemplo/ que Caracas dio." En conclusión, aunque el 19 de abril de 1810 no fue declarada jurídicamente la Independencia de Venezuela, políticamente se produjo un cambio radical que culminó con la declaración del 5 de Julio. No obstante no hay que olvidar que para entonces la idea de la independencia todavía no aparecía como objetivo principal en las mentes de los líderes revolucionarios y será solo, cuando se convoque al primer congreso de Venezuela, y a través de los meses de discusión ideológica que seguirán, que tal planteamiento llegará a materializarse.
El mismo 19 de abril de 1810 fue redactada el acta en la cual se consignaba el establecimiento de un nuevo gobierno. En la misma se precisaba que el gobernador y capitán general, el intendente de Ejército y Real Hacienda, el subinspector de artillería y el auditor de Guerra y asesor general, así como la Real Audiencia, quedaban privados del mando que ejercían, a la vez que suprimían esas instituciones. En consecuencia el Cabildo de Caracas, con sus 2 alcaldes José de Llamozas y Martín Tovar y Ponte a la cabeza, asumió el poder, incorporando en su seno a los representantes del clero, del pueblo y de los pardos, ya mencionados, mientras que el mando militar era confiado momentáneamente al teniente coronel Nicolás de Castro y al capitán Juan Pablo Ayala. El acta del 19 de abril fue firmada por todos los asistentes al Cabildo extraordinario de ese día, incluyendo a los funcionarios españoles depuestos (Vicente Emparan), los que desempeñaron un papel secundario y los que a partir de ese momento asumieron el poder (Tovar, Roscio, Cortés de Madariaga, etc.). El acta fue leída el mismo día en diversos lugares de Caracas por los escribanos Fausto Viaña y José Tomás Santana, quienes certificaron que la población reaccionó gritando las siguientes consignas: "Viva nuestro Rey Fernando VII, nuevo Gobierno, Muy Ilustre Ayuntamiento y Diputados del Pueblo que lo representan".
En definitiva la revolución se llevó a cabo sin derramamiento de sangre. Los funcionarios depuestos fueron conducidos luego a La Guaira y encerrados en las fortalezas o confinados a bordo de buques anclados hasta que se les expulsó. De acuerdo con el testimonio de uno de ellos, el intendente Basadre, durante el tiempo que estuvo en prisión pudo apreciar como los revolucionarios compusieron e hicieron circular canciones alegóricas de su Independencia, en las cuales convidaban a toda Hispanoamérica a hacer causa común y a tomar "... a los caraqueños por modelo para dirigir revoluciones" Al parecer, ya entonaban la canción que mucho más tarde fue declarada Himno Nacional de Venezuela: "Unida por lazos/ que el cielo forjó/ la América toda/ existe en Nación/ y si el Despotismo levanta la voz seguid el ejemplo/ que Caracas dio." En conclusión, aunque el 19 de abril de 1810 no fue declarada jurídicamente la Independencia de Venezuela, políticamente se produjo un cambio radical que culminó con la declaración del 5 de Julio. No obstante no hay que olvidar que para entonces la idea de la independencia todavía no aparecía como objetivo principal en las mentes de los líderes revolucionarios y será solo, cuando se convoque al primer congreso de Venezuela, y a través de los meses de discusión ideológica que seguirán, que tal planteamiento llegará a materializarse.




Venezuela. Del 11 al 13 y 14 de abril: una cronología del golpe de 2002

 Esta breve y concisa cronología se concentra fundamentalmente en el desarrollo de la marcha y sus planificadas acciones y consecuencias. 19 años después, y con muchas investigaciones acumuladas, queda clara la necesidad de revisitar, de forma permanente, los acontecimientos de nuestro pasado reciente. 

11 de abril de 2002

10:00 am-2:00 pm. El mando de la oposición -la autodenominada Sociedad Civil, conformada por una alianza entre la patronal Fedecámaras y la Confederación de Trabajadores de Venezuela (CTV)- convocó a una marcha de protesta contra el Gobierno Bolivariano, alegando supresión de libertades, inseguridad, pobreza, dictadura, violencia de Estado, entre otros argumentos. Dicha concentración contaba con permisos civiles y de tránsito sólo para los sectores caraqueños comprendidos entre Parque del Este (hoy Parque Generalísimo Francisco de Miranda) y PDVSA Chuao. A medida que la concentración se desarrolló y tomó volumen de asistencia, y en medio de una nutrida cobertura mediática por parte de todos los medios de comunicación privados, ya para eso momento comprometidos con el movimiento golpista, los líderes opositores activaron el plan conspirativo, desviando la marcha hacia al Palacio de Gobierno ubicado en Miraflores para -según ellos señalaron- exigir la renuncia del presidente Hugo Chávez. Desde muy temprano comenzó a circular la arenga de ir hacia Miraflores.

Al mismo tiempo y al otro lado de la ciudad, el alcalde del Municipio Libertador, Freddy Bernal, denunció por televisión las irregularidades de la marcha y el llamado a dirigirse hacia el Palacio; mientras que otros líderes chavistas llamaban a concentrarse ante el Palacio de Miraflores. Cientos de hombres y mujeres se agruparon frente a la sede del gobierno. A las 2 de la tarde, la marcha ya se acercaba al centro de Caracas.

Antes de que la marcha llegara a PDVSA Chuao, ya habían comenzado a manifestarse irregularidades. Personas dentro de la misma recibieron impactos de bala a poca distancia. Ese día, Venevisión pagó la exclusiva de uso sobre las antenas apostadas en el Waraira Repano, la línea visual privilegiada de las repetidoras se encontraba en un edificio que daba directamente sobre Puente Llaguno; ninguna otra emisora televisiva podía usarla ese día. El Nacional, conforme avanzaba la marcha, sacó a la calle una edición extra con el titular “La batalla final será en Miraflores”. El resto de los medios privados encubría las irregularidades dentro de la marcha, además de los avisos de las autoridades que les prohibían llegar hasta el centro de Caracas. De la mano de Guaicaipuro Lameda, Iván Molina Tamayo y Enrique Mendoza, avanzaba la marcha.

2:00 pm a 3:00 pm. La marcha opositora logra franquear los endebles -en su mayoría cómplices- cordones que la Policía Metropolitana intentó colocar en su camino hasta el centro de Caracas. Pero dicha manifestación no logra arribar a su objetivo.

2:15 pm. El General Lucas Rincón, Inspector General de las Fuerzas Armadas, se pronunció junto al Alto Mando Militar en cadena nacional de televisión para señalar que sólo existían algunos focos de violencia, que ningún oficial había renunciado y que el presidente Chávez estaba en su despacho. Según declaración oficial:

“Cadena Nacional: Mensaje a la Nación, General en Jefe Lucas Rincón Romero Inspector General de la Fuerza Armada de Venezuela. Caracas, 11 de abril de 2002, poco después de mediodía. Sentimos en la Fuerza Armada que no es hora de seguir alimentando controversias, no es hora de continuar acentuando la conflictividad social, todo lo contrario, debemos buscar a todo evento el mutuo entendimiento, el diálogo, el diálogo fructífero y las decisiones adecuadas en pro del bienestar de la nación. Las actuaciones de la Fuerza Armada Nacional en este conflicto se han desarrollado dentro del marco exigido por la Constitución y la ley en pro del mantenimiento del orden interno del país, función que ha sido asumida por la Guardia Nacional de Venezuela, componente que ha observado en todo momento y lugar el debido respeto a la ciudadanía y a los derechos humanos. Se ha comentado que el señor Presidente de la República se encuentra detenido en el Fuerte Tiuna o en Miraflores, lo desmiento categóricamente: el señor Presidente se encuentra en su despacho. Desmiento categóricamente la renuncia del Alto Mando Militar, aquí están presentes todos los miembros del Alto Mando Militar evaluando minuto a minuto la situación que vivimos. A pesar de algunos focos de perturbación, la situación en el país es de normalidad. Finalmente, llamamos al pueblo venezolano a mantener la calma, al ejercicio de un ejemplar civismo y a rechazar toda incitación a la violencia, al desorden y a la anarquía”.

Paralelo a los acontecimientos, un grupo de oficiales se reúne en una oficina al este de Caracas, con un grupo de periodistas y un equipo técnico que contaba con señal microondas emitiendo un comunicado desconociendo al Gobierno y denunciando las muertes que todavía no habían ocurrido en el centro de Caracas.

3:00 a 4:30 pm aproximadamente. En las inmediaciones de la avenida Baralt, disparos provenientes de edificios de la zona -entre otros puntos estratégicos- impactan en manifestantes opositores y los activistas bolivarianos que se encontraban defendiendo el hilo constitucional en Puente Llaguno. Francotiradores sobre los hoteles Edén y Ausonia disparaban sobre Llaguno y, más abajo, contra la marcha opositora. La Policía Metropolitana, a su vez, también disparaba contra el puente en el que se encontraban apostados los militantes bolivarianos.

5:30 pm. Los medios de comunicación privados, Venevisión a la cabeza, lanzan el expediente Llaguno: muestran imágenes de activistas bolivarianos apostados en Puente Llaguno disparando hacia la avenida Baralt. Estas imágenes servirían como notitia criminis con el fin de inculpar al presidente Hugo Chávez de las muertes que los francotiradores y agentes conspiradores ocasionaron durante el mediodía. Se trata del punto álgido de la agenda golpista. En ella incriminaron a quienes defendían a la población desde Puente Llaguno contra los disparos de la Policía Metropolitana y los francotiradores.

10:00 pm. Es interrumpida la señal del canal oficial, Venezolana de Televisión (VTV). Comenzaron a transmitirse informaciones, por los medios de comunicación privados, señalando que el presidente Hugo Chávez estaba fuera del poder. En ese momento se había confirmado la salida de su esposa Marisabel Rodríguez, en compañía de su familia, hacia Barquisimeto.

12 de abril de 2002

1:30 am. Se estima que aproximadamente a esta hora los generales Manuel Rosendo, e Ismael Hurtado Soucre, mediaron la salida del presidente Hugo Chávez desde Miraflores hacia el Fuerte Tiuna, ubicado a media hora del palacio, en el límite de Caracas.

3:25 am. En cadena nacional de televisión, el General Lucas Rincón anunció que se le había solicitado la renuncia al presidente Chávez y que éste la había aceptado. Media hora después, escoltado por el general Néstor González González, el mandatario fue trasladado desde Miraflores al Fuerte Tiuna donde lo recibieron varios militares rebeldes y Monseñor Baltazar Porras. La finalidad de este encuentro era obligar al presidente Chávez a firmar la renuncia. Tal renuncia jamás se efectuó, nunca se vio al mandatario firmando, ni emitió una rueda de prensa alguna. La única imagen del Presidente se obtuvo a horas de la madrugada, uniformado con chaqueta y boina, de espaldas, saliendo de un vehículo para ingresar a las instalaciones del mencionado recinto militar.

4:55 am. El presidente de la Federación de Cámaras de Comercio y de Industria de Venezuela (Fedecámaras), Pedro Carmona Estanga, es presentado por televisión privada al país como el líder del gobierno transitorio de facto, respaldado por los mandos militares golpistas.

Aunque en la madrugada se había anunciado a Carmona Estanga como mandatario temporal, en esas mismas horas comenzó a conocerse información según la cual Hugo Chávez no había renunciado. Primero, información proveniente del fiscal militar que lo entrevistó, y luego su hija María Gabriela, quien manifestó -a una cadena internacional de noticias- que su padre aseguró que nunca había renunciado, y que era un presidente prisionero. Los medios de comunicación prácticamente no dieron cobertura a esta noticia, de hecho, salvo la programación parcializada y conducida por los medios de la oposición, se transmitían programas que nada tenían que ver con los hechos (por ejemplo, programas sobre modas, arte culinario, deportes, televisión infantil, etc.) y anuncios publicitarios.

Por la mañana comenzaron a ser detenidos ministros y figuras del gobierno del Comandante Chávez.

2:00 pm. El Comandante del Ejército, Efraín Vásquez Velasco, implicado en el golpe de Estado, convocó a una reunión de generales con mandos medios, en la que se decidió desconocer a Carmona Estanga, y a la mal llamada transición, si no se hacían cambios en el nuevo gobierno. El Fiscal General de la República, Isaías Rodríguez, ofreció una conferencia de prensa en la que aseguró que se había producido un golpe de Estado y que el nuevo gobierno era inconstitucional. Esta rueda de prensa fue inmediatamente censurada por los medios de comunicación privados.

5:30 pm. Para entonces el espíritu en las calles de las principales ciudades de Venezuela era de estupor ante el golpe fascista, mientras se producían protestas y marchas de los seguidores del presidente Hugo Chávez para defender su gobierno. Como parte del plan mediático para legitimar el golpe de Estado, buscar calmar a la población, sobre todo los sectores afectos a Chávez, los golpistas y los medios hacen una transmisión donde Pedro Carmona es juramentado en el Palacio de Miraflores como presidente interino. Durante el acto se leyeron los “Decretos de Constitución del Gobierno de Transición Democrática y de Unidad Nacional”, con los cuales se disolvían los poderes públicos y se rompía el orden constitucional, instaurando una dictadura.

10:00 pm. Es interrumpida la señal del canal oficial, Venezolana de Televisión (VTV). Comenzaron a transmitirse informaciones, por los medios de comunicación privados, señalando que el presidente Hugo Chávez estaba fuera del poder. En ese momento se había confirmado la salida de su esposa Marisabel Rodríguez, en compañía de su familia, hacia Barquisimeto.

13 de abril de 2002

1:30 am. Se estima que aproximadamente a esta hora los generales Manuel Rosendo, e Ismael Hurtado Soucre, mediaron la salida del presidente Hugo Chávez desde Miraflores hacia el Fuerte Tiuna, ubicado a media hora del palacio, en el límite de Caracas.

3:25 am. En cadena nacional de televisión, el General Lucas Rincón anunció que se le había solicitado la renuncia al presidente Chávez y que éste la había aceptado. Media hora después, escoltado por el general Néstor González González, el mandatario fue trasladado desde Miraflores al Fuerte Tiuna donde lo recibieron varios militares rebeldes y Monseñor Baltazar Porras. La finalidad de este encuentro era obligar al presidente Chávez a firmar la renuncia. Tal renuncia jamás se efectuó, nunca se vio al mandatario firmando, ni emitió una rueda de prensa alguna. La única imagen del Presidente se obtuvo a horas de la madrugada, uniformado con chaqueta y boina, de espaldas, saliendo de un vehículo para ingresar a las instalaciones del mencionado recinto militar.

4:55 am. El presidente de la Federación de Cámaras de Comercio y de Industria de Venezuela (Fedecámaras), Pedro Carmona Estanga, es presentado por televisión privada al país como el líder del gobierno transitorio de facto, respaldado por los mandos militares golpistas.

Aunque en la madrugada se había anunciado a Carmona Estanga como mandatario temporal, en esas mismas horas comenzó a conocerse información según la cual Hugo Chávez no había renunciado. Primero, información proveniente del fiscal militar que lo entrevistó, y luego su hija María Gabriela, quien manifestó -a una cadena internacional de noticias- que su padre aseguró que nunca había renunciado, y que era un presidente prisionero. Los medios de comunicación prácticamente no dieron cobertura a esta noticia, de hecho, salvo la programación parcializada y conducida por los medios de la oposición, se transmitían programas que nada tenían que ver con los hechos (por ejemplo, programas sobre modas, arte culinario, deportes, televisión infantil, etc.) y anuncios publicitarios.

Por la mañana comenzaron a ser detenidos ministros y figuras del gobierno del Comandante Chávez.

2:00 pm. El Comandante del Ejército, Efraín Vásquez Velasco, implicado en el golpe de Estado, convocó a una reunión de generales con mandos medios, en la que se decidió desconocer a Carmona Estanga, y a la mal llamada transición, si no se hacían cambios en el nuevo gobierno. El Fiscal General de la República, Isaías Rodríguez, ofreció una conferencia de prensa en la que aseguró que se había producido un golpe de Estado y que el nuevo gobierno era inconstitucional. Esta rueda de prensa fue inmediatamente censurada por los medios de comunicación privados.

5:30 pm. Para entonces el espíritu en las calles de las principales ciudades de Venezuela era de estupor ante el golpe fascista, mientras se producían protestas y marchas de los seguidores del presidente Hugo Chávez para defender su gobierno. Como parte del plan mediático para legitimar el golpe de Estado, buscar calmar a la población, sobre todo los sectores afectos a Chávez, los golpistas y los medios hacen una transmisión donde Pedro Carmona es juramentado en el Palacio de Miraflores como presidente interino. Durante el acto se leyeron los “Decretos de Constitución del Gobierno de Transición Democrática y de Unidad Nacional”, con los cuales se disolvían los poderes públicos y se rompía el orden constitucional, instaurando una dictadura.

Para ese momento, y a pesar de la represión desatada por PM y policías municipales, el pueblo en la calle era un hecho irreversible.

7:00 pm. Después de ser juramentado Pedro Carmona como presidente de facto, el pueblo, en amplio respaldo al presidente Chávez, tomó las principales calles del oeste de Caracas. Simultáneamente se produce un silencio informativo sobre los primeros actos del nuevo gobierno, con el argumento de “evitar nuevos actos de violencia”.

Madrugada-mediodía. Una concentración popular comenzó a reunirse a las puertas del Fuerte Tiuna. Los manifestantes exigían la liberación del Presidente. Protestas similares venían creciendo desde el día anterior en diversos puntos de la capital y en numerosas ciudades del interior. Fue decisiva la concentración que hubo en las puertas de la 42 Brigada de Infantería Paracaidistas, en Maracay: fueron unidades de esa Brigada las mismas que comandó Chávez 10 años antes, el 4 de febrero.

Las posiciones manifestadas por la mayoría de altos mandos, mandos medios y tropa en la Fuerza Armada revertían el golpe a la par de que más gente a lo largo del país se sumaba a las concentraciones contra el golpe, consagrando el vínculo cívico-militar.

2:45 pm. El presidente se encontraba en Turiamo, como consta en su carta: 

“Turiamo, 13 de abril 2002


a las 14:45
(y a quien pueda interesar).
Presidente de la República Bolivariana

Al pueblo venezolano…

Yo, Hugo Chávez Frías, venezolano,

de Venezuela, declaro:

No he renunciado al

poder legítimo que el

pueblo venezolano me dio.

¡¡Para siempre!!

Hugo Chávez F.”

Luego será llevado hasta la isla de La Orchila.

3:00 pm aproximadamente. Mientras crecía notablemente la concentración en Miraflores, se produce la estampida golpista. Completamente rodeado por el pueblo, es reconquistada por Casa Militar.

6:00 pm. La dictadura comienza a disolverse. A mediados de la tarde, el Comandante del Ejército, el general Efraín Vásquez Velasco, anunció públicamente que no respaldaba a Carmona Estanga porque se había roto el hilo constitucional. A esta medida se suma posteriormente el Comandante de la Guardia Nacional, el general Carlos Alfonso Martínez.  Al perder el apoyo de los mandos militares, Pedro Carmona revoca su decisión de disolver la Asamblea.

Ya con todas las guarniciones pronunciadas en contra del golpe, las fuerzas bolivarianas lanzan el primer mensaje a quienes retienen al Comandante en  La Orchila. Se temía el magnicidio: “Devuelvan al señor Presidente sano y salvo antes de las 9 de la noche o aténganse a las consecuencias”. Ya en este punto, el desmoronamiento del golpe que instaló a Carmona, el breve, era irreversible.

9:00 pm aproximadamente. Temiendo por la vida del Comandante, el Alto Mando lanza el ultimátum definitivo: tenían una hora para entregar sano y salvo al Presidente. 

El gobierno, ya restituido y fuera de la clandestinidad retoma el hilo constitucional: estando ministros y representantes de los poderes, se juramenta a Diosdado Cabello como presidente rovisional, a la espera del retorno del Presidente.

Desde Puerto Cabello, una lancha patrullera con 30 efectivos y tres helicópteros con 60 más, comandados por el general Alí Uzcátegui, partieron rumbo a La Orchila. El éxito de la operación militar creó un precedente en la historia mundial y latinoamericana: nunca se había logrado restaurar el orden democrático, casi siempre eran los militares los principales conspiradores contra la democracia en Venezuela; el ejemplo fue distinto: el golpe de Estado fue neutralizado por la unidad cívico-militar.

11:00 pm-12:00 pm aproximadamente. El Presidente es rescatado. En su vía de regreso a Miraflores, el general Julio García Montoya recuerda: “Habíamos hecho los arreglos para que llegara a la 42 Brigada, pero en una conversación telefónica que sostuve con él, me planteó su deseo de llegar directamente a Miraflores”. Tenía que ir directo a Miraflores, donde lo esperaba la marea de pueblo en la calle.

14 de abril de 2002

Madrugada. El presidente Hugo Chávez regresa al Palacio de Miraflores, en helicóptero de la Fuerza Armada Bolivariana, casi 50 horas después de haber sido sacado de allí por elementos fascistas, y ahora siendo restituido por el pueblo en la calle y los militares patriotas.

Fuente: Misión Verdad


Batalla de San Felix

 


El 11 de abril de 1817 las fuerzas patriotas al mando del general Manuel Carlos Piar derrotan en la Mesa de Chirica, al sur de San Félix, estado Bolívar, a un fuerte contingente español al mando del Brigadier La Torre, que había llegado desde Angostura del Orinoco (hoy Ciudad Bolívar) para acabar con la sublevación patriota en la zona de confluencia de los ríos Orinoco y Caroní.

La batalla fue breve, apenas media hora de duración, pero representó la derrota de las fuerzas españolas enviadas desde Angostura del Orinoco, hoy Ciudad Bolívar, que desde el año 1816 intentaban infructuosamente detener el alzamiento patriota en las principales poblaciones de la Provincia de Guayana y mantener el control del tráfico de mercancías, alimentos y pertrechos por las vías del río Orinoco, en el tramo entre los Castillos de Guayana (Guayana la Vieja) y Angostura del Orinoco.

El general Piar ya había logrado el control de las Misiones del Caroní, en lo que hoy es la ribera sur del embalse de Macagua, dejando a los realistas sin su principal centro de abastecimiento.

El Brigadier La Torre salió desde Angostura para tratar de retomar esta zona, liderando un contingente de 1.600 infantes, 200 jinetes y 2 cañones.

En la Mesa de Chirica, se encontró con las fuerzas de Piar, lideradas por oficiales a los que apenas conocía personalmente o no tenían mayor experiencia, y 500 fusileros, 800 lanceros de a pie, 500 indígenas flecheros y 400 jinetes.

La desventaja en hombres y experiencia de los patriotas fue compensada por la habilidad de sus jinetes, logrando derrotar a La Torre en el Cerro El Gallo, punto alto de la meseta.

El triunfo de Piar llevó a que los realistas abandonaran Angostura del Orinoco seis días después, dejando a la Provincia de Guayana en manos patriotas y lista para abastecer a partir de entonces la campaña libertadora de Simón Bolívar en Venezuela y la Gran Colombia

La liberación de Guayana sirvió, además, para que empresarios y terratenientes aportaran donativos al Ejército Libertador, que para ese momento ya sufría una crisis por la falta de recursos económicos.

El control sobre el comercio a través del río Orinoco con países de las Antillas aseguró también recursos para la compra de armas y municiones, cambiando el equilibrio de fuerzas entre los patriotas y los realistas.


También se aseguró la provisión continua de reses, caballos y equipos de montura, así como los alimentos requeridos para la manutención diaria de miles de hombres que a partir de ese momento iniciarían una serie de batallas para liberar todo el oriente y centro de Venezuela y, más tarde, se movilizarían a Nueva Granada para continuar la guerra de independencia.

Por esta razón, la Batalla de San Félix es considerada por muchos historiadores como de una importancia similar a la Batalla de Carabobo y otras grandes fechas de la gesta libertadora.